Vamos a intentar escribir estas entradas intentando que inspiren un poco.
Y me he decidido a montar esta blog porque hace ya tiempo que busco en la red algo así: un sitio donde encontrar unas líneas que refuercen mi convencimiento de que todo acabará por salir bien. Y es que a pesar de ser optimista por naturaleza llevamos unos años que se las traen…
Al menos yo, en infinidad de ocasiones he necesitado mucha ayuda y compañía de otros para recolocarme y asegurarme que voy por buen camino en este progreso personal en el que llevo años enfrascada. Y que tan a menudo parece ir en dirección contraria a lo que veo fuera de mi . Y como en casi todas esas situaciones he tenido la suerte de poder compartir con otros lo que me inquietaba y costaba superar, he creído que sería buena idea empezar a aportar mi granito de arena y abrirme a quien, en algún momento, necesite un poco de ánimo. Que lo que aquí vayamos apuntando pueda servir de apoyo a otro.
Como verás, si conoces algo de los dos libros que he compuesto hasta ahora: “Un sendero que atraviesa la cocina” y “Haciendo por verte”, esta página recrea el mismo lenguaje y cosmovisión que se plasman en ellos.
Si has llegado hasta aquí te doy la más calurosa bienvenida. Porque, aunque quizás no lo creas, es muy probable que seas más que valiente.